Me gusta Bob ,pero este documental no lo aguanta ni el fumado

Impresionante película!
Viva Bobby!!

El excelente †œNo direction home† de Martin Scorsese, volvía a poner sobre el tapete una cuestión que nunca ha sido aclarada del todo: la de cuál fue el paradero de aquel joven idealista comprometido con las causas de su época en los primeros 60, y que se pavoneaba con aires de rockstar pocos años más tarde, en la película †œDon†™t look back†. †œNunca me sentí identificado con las actividades de los grupos radicales de aquella época†, sentencia Dylan frente a las cámaras, reavivando la vieja polémica.

Muchos saben sobre la impostura en aquella primera etapa de su carrera, y de que tengamos la sensación de que, pese a todo, Dylan utilizase el Folk como una plataforma en la que impulsarse, sabedor de su talento y su capacidad para tocar la fibra sensible de la gente. Y eso es lo que muchos no le perdonan. En †œNo direction home†, se deja entrever esa sensación, la de un arribista que se introduce en una escena musical en alza a su llegada a New York, pero dispuesto a pisar a quien fuese necesario para llegar hasta lo más alto.
Poniendose el disfraz de Bob Dylan, el working class hero luchador contra las injusticias, bajo el que residía Robert Zimmerman, el judio ególatra cínico que quería ser Little Richard.

Poniendose el disfraz de Bob Dylan, el working class hero luchador contra las injusticias, bajo el que residía Robert Zimmerman, un ególatra cínico que quería ser Little Richard.